
The Cowboy of Guara
Guara es una abrupta tierra repleta de serpenteantes cañones y rocosas montañas; un lugar donde los inviernos son glaciales y los veranos, abrasadores.
Todos los episodios
The Call of the High Ways
Los Pirineos dibujan ancestrales caminos entre sus faldas; una red de senderos cuidadosamente trazados por generaciones pasadas para sustentar una forma de vida que, lamentablemente, ha desaparecido con el paso del tiempo.
From Oak to Anchor
El País Vasco es una tierra de verdes montañas que se alzan firmes frente al salvaje océano Atlántico. Es una tierra de balleneros e intrépidos marineros que dominaron las olas con barcos construidos utilizando, por un lado, los árboles que cubrían las montañas costeras y, por el otro, el hierro extraído y refinado de la misma zona.
The Outlaw Sport
La historia y el legado de la construcción de senderos en las montañas North Shore de Vancouver es un relato que merece la pena contar. Y es que muy pocos lugares en el mundo han tenido un impacto tan significativo en la comunidad del mountain bike como la meca canadiense que es hoy día North Shore.
Lead by Generations
Cada marca de la puerta de The Old Smithy (“La Antigua Herrería”) representa un momento del tiempo. Puede que los nítidos bordes que dejó el hierro candente aparezcan ahora algo más apagados por el efecto del clima de Yorkshire a lo largo de dos siglos, pero aun así siguen siendo visibles. Una conexión tangible con la historia de Swaledale.
Build It & They Will Come
Dafydd Davis es un hombre modesto. Salvo que le tires de la lengua, no habla de sí mismo como un pionero; pero cuando escuchas su relato, te das cuenta de que te encuentras ante la historia de uno de los mayores avances en la historia del mountain bike.
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Dafydd Davis es un hombre modesto. Salvo que le tires de la lengua, no habla de sí mismo como un pionero; pero cuando escuchas su relato, te das cuenta de que te encuentras ante la historia de uno de los mayores avances en la historia del mountain bike.
Esta disciplina experimentó su primer auge a finales de los ochenta y principios de los noventa. A pesar de que cada día era más popular, los usuarios de montaña ingleses se limitaban a rodar por carreteras, senderos de caballos y otros caminos de tierra.
«Entonces, ¿fuiste el primero?»
«Pues podríamos decir que sí; supongo que lo fui»
Los primeros senderos (que siguen siendo parte de la actual red de Coed-y-Brenin) eran poco más que antiguas sendas reconvertidas con algún pequeño retoque adicional y señalización. Tenían tramos con flow y eran, además, técnicamente exigentes, especialmente a la luz de la tecnología y geometría de las bicis de aquella época.
Había nacido un nuevo centro BTT, y con él toda una nueva corriente de ciclismo en el Reino Unido.

Rise M20
Angus y Rob montan nuestra Rise H20 en dos de las tres combinaciones de colores estándar disponibles. Rob utiliza la sutil versión blanca y verde, mientras que Angus ha optado por el carbono azul con logotipos rojos y dorados.
¿Qué es un centro BTT?
Desde aquellos primeros pasos hacia la construcción de un complejo diseñado específicamente para mountain bikes, el concepto de centro BTT apenas ha evolucionado.
Circuitos accesibles de senderos diseñados expresamente y, a ser posible, con el máximo número de singletracks.
Rutas señalizadas con salidas y metas claras. Grados de dificultad que suponen un reto y oportunidades de progresión para ciclistas de todos los niveles. Además de estas características, debe tener todo lo que hace que los ciclistas se sientan cómodos: entre otras cosas, parking, cafetería, taller y tienda o una persona atendiendo a la llegada.
A medida que los primeros senderos fueron ganando popularidad, comenzó a ser necesario clasificarlos por niveles. Cosas que ahora damos por supuestas –como los postes de señalización en cada cruce hasta ese lugar donde comprar una cámara de repuesto o un bocadillo– tuvieron que pasar por la cabeza de alguien en algún momento antes de hacerse realidad.
La historia se repite
La historia rara vez es ese relato lineal que desearíamos que fuera. Aunque Dafydd fue sin duda uno de los primeros en desarrollar el concepto de centro BTT, él no fue el único. Al menos no por mucho tiempo.
De manera casi simultánea a Dafydd en Gales, Rik Allsop mantenía las mismas conversaciones con la Comisión Forestal de Escocia, ensuciándose las manos para abrir senderos en los bosques de Mabie y Ae.


Progresión
Cuando conocimos a Rik, lo encontramos apoyado contra la puerta abierta de su tienda de bicicletas, situada a pocos metros del lugar donde puso en marcha sus primeros proyectos en Mabie. Su interior esconde todo un tesoro oculto de materiales, algunos de los cuales datan incluso de aquellos días. Enmarcado en una pila de cubiertas pinchadas, se puede entrever un mapa de los senderos de Drumlanrig, construidos por Rik con un presupuesto reducido. Muchos de ellos se abrieron a mano utilizando únicamente los recursos y materiales disponibles en el lugar.

Rik se reclina antes de comenzar su relato, casi como si fuera un piloto de descenso asiéndose en la rampa de salida. Sus historias también fluyen a ritmo de competición.
Porque, ¿cómo podrían si no condensarse 20 años de aventuras en una breve entrevista?
«A lo que voy es que ya estábamos construyendo tramos de sendero mucho antes de empezar a trabajar con la Comisión Forestal. Obviamente, lo hacíamos al margen de la ley, pero éramos solo unos cinco amantes del BTT en la zona, nada que ver con lo que esto es hoy. No estoy seguro de que un buen día nos dijéramos "¡vamos a montar un centro BTT!". Creo que, más bien, nos dimos cuenta de que teníamos que implicar a la Comisión Forestal si queríamos que aquello que estábamos haciendo perdurase en el tiempo».
¡Es la primera vez que uso una Rise y me lo estoy pasando en grande!
Angus
Parte del paisaje
Es interesante escuchar a Dafydd y a Rik hablar paralelamente de los senderos que construyeron. Los dos los recuerdan con la misma pasión y cariño, y al hacerlo transmiten un estrecho vínculo con la tierra que va más allá de simplemente trazar un recorrido para bicicletas.
Ambos utilizaron los materiales de los que disponían en el lugar para abrir los senderos y minimizaron el uso de recursos para ponerlos en marcha. Esta decisión surgió de su deseo de crear un sendero con la apariencia de haber estado ahí siempre, que fuese parte integrante del terreno y no un añadido a este. Rik lo resume a la perfección:
La naturaleza nos da tantas opciones, más de las que podríamos nunca imaginar, así que, ¿por qué no sacar el máximo de ello?
«Eso es, en definitiva, el flow, ¿no?», pregunta Rik, combinando en sus explicaciones esa mezcla de ingeniería, ciencia, arte y el exigente trabajo que exige construir un sendero. El verdadero arte está en crear flow independientemente de si predominan las raíces, la piedra suelta o los baches en el terreno. Es un flow distinto en cada caso, pero es flow al fin y al cabo.
Dominar estos senderos requiere tanto de concentración como de aptitud física, una recompensa que se consigue al unir las piezas del puzle rodando a toda velocidad.

Una evolución circular
En cierto modo, ni Drumlanrig ni Coed-y-Brenin tienen mucho que ver con los cientos de centros BBT que han inspirado. Pese a tener mayor recorrido que la mayoría, siguen siendo interesantes y cautivadores para las bicis actuales. En ellos, es preciso controlar la velocidad y elegir bien las líneas; de hecho, tu grado de confianza será el que defina la línea que seguirás.
Estos centros han hecho que el ciclismo de montaña sea más accesible para millones de personas, ya sea por su difusión geográfica, por su adaptación técnica o, simplemente, por su popularización.

Comunidad
Tanto Rik como Dafydd coincidieron en una palabra al definir los centros BTT: comunidad. Una imagen que podría resumir la esencia de un centro BTT es una gran cantidad de riderss reunidos un domingo lluvioso en el enorme centro de visitantes de Coed-y-Brenin, hundiendo los pies en los charcos de barro mientras beben de humeantes tazas. Otra sería la de las rutas familiares abiertas que Rik guía los sábados y con las que está formando a una nueva generación de amantes del MTB.


Conoce las bicicletas de este Trail Tales
Rise M20
La Rise es una gran elección para el trail; ofrece una batería más que suficiente para recorrer tus senderos favoritos y una gran naturalidad de manejo para que disfrutes al máximo.


Rob Jolley
Rob se atreve prácticamente con cualquier cosa, desde la agricultura hasta las obras en los senderos y desde el mountain bike hasta el gravel. Haciendo honor a su apellido (Jolley), Rob es alegre por naturaleza y disfruta a tope de cada travesía.

Angus Hardie
Angus forma parte de la familia Orbea y ciertamente sabe cómo sacar el máximo partido a nuestras bicis. Con un estilo rápido y fluido, no hay sendero que se le resista. Cuenta la leyenda que Angus fue conocido una vez en determinados círculos como Gin Slayer.
La historia no solo consiste en lo que está escrito en los libros. La historia se encuentra en las personas, sus vidas y sus experiencias.
El mejor tipo de historia es aquella que es tangible; la que podemos palpar y sentir, y que nos devuelve el gesto de alguna forma. En el segundo episodio de Trail Tales, viajamos a la zona de los Yorkshire Dales para recorrer un sendero con más historia que la mayoría.
La senda única se abre paso por las escarpadas laderas de Gunnerside Gill, conectando el pueblo homónimo situado más abajo con una ciudad fantasma poblada por edificios mineros abandonados.
Ubicados en un páramo desolado a la par que hermoso, los túneles se adentran varios kilómetros en las profundidades de las colinas. Desde los albores de la minería de plomo en la época romana hasta su apogeo y declive en los siglos XVIII y XIX, los seres humanos han dado forma al paisaje de Gunnerside y, con ello, han dejado su huella en él.



Montar una nueva bici por primera vez en un vídeo puede poner nervioso a cualquiera, pero, por suerte, la Occam proporcionó sensaciones extraordinarias desde el primer momento.
Rebecca
Al fondo de la senda se encuentra The Old Smithy (“La Antigua Herrería”) de Gunnerside, un negocio con mucho que contar.
De hecho, apenas ha sufrido cambios desde su apertura en 1795. Stephen Calvert, la sexta generación de su familia que trabaja como herrero, se encuentra en el mismo lugar que ocuparon sus antepasados. Calienta el metal en el mismo horno y lo moldea sobre el mismo yunque.


Puede que el mundo más allá de la increíblemente característica puerta del Smithy se haya vuelto casi irreconocible, pero al entrar, descubriréis que el viejo arte de la herrería perdura.
Stephen trabaja eficazmente y con destreza mientras extrae el metal candente del horno. Cada golpe de martillo tiene su función. En muchos aspectos, se trata de un proceso sencillo, pero, al igual que montar en bici, se necesita tiempo para dominar plenamente la técnica. Es posible que el herrero de Gunnerside ya no preste su servicio a las minas, pero su arte se mantiene muy vivo.


Occam M-LTD
Los escarpados descensos rocosos y las impactantes ascensiones de estos valles de Yorkshire resultan ideales para la Occam M-LTD.
La tranquilidad se respira en las colinas circundantes: atrás quedan los tiempos de los mineros de Swaledale.
Sin embargo, su travesía diaria de ida y vuelta a los túneles ha dejado una senda para que nosotros, ciclistas, la recorramos a través de explotaciones mineras en ruinas y ondulantes laderas. El chasquido de las mazas sustituye a los gritos, cánticos, parloteo y ruidos metálicos de la industria, amplificando los sonidos del pasado.


Como ciclistas, podemos seguir literalmente los pasos de la historia y, de esta forma, la mantenemos viva un poco más, al igual que hace Stephen cada vez que abre la puerta de The Smithy.

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Occam M-LTD
Los escarpados descensos rocosos y las impactantes ascensiones de estos valles de Yorkshire resultan ideales para la Occam. Ligera y eficiente, se comporta de forma increíble en la escalada, pero también te permite apretar al máximo en los descensos.


Rob Jolley
Rob se atreve prácticamente con cualquier cosa, desde la agricultura hasta las obras en los senderos y desde el mountain bike hasta el gravel. Haciendo honor a su apellido (Jolley), Rob es alegre por naturaleza y disfruta a tope de cada travesía.

Rebecca Williams
Rebecca es una joven del norte a la que podríamos llamar “la trituradora”. Se ha curtido en las rocas, las raíces y el barro del Peak District y el Wharncliffe Wood. Posee un talento extraordinario sobre la bicicleta y es una gran amante de la vida al aire libre.
La historia y el legado de la construcción de senderos en las montañas North Shore de Vancouver es un relato que merece la pena contar. Y es que muy pocos lugares en el mundo han tenido un impacto tan significativo en la comunidad del mountain bike como la meca canadiense que es hoy día North Shore.
El auge progresivo de estos senderos comenzó a sobrepasar los límites del mountain bike en la década de los 80 y se topó con numerosos obstáculos en el camino.

“Comenzó en la década de los 80, cuando Digger y sus compañeros se pasaron horas en el bosque construyendo estos senderos para un deporte que todavía no existía”.


“El distrito estuvo firmemente en contra del mountain bike durante mucho tiempo. No me puedo imaginar el estrés que sintieron los constructores en esa época al ser tachados de ‘mala gente’. A causa de estas medidas tan estrictas necesitábamos organizarnos y, finalmente, en 1997 nació la North Shore Mountain Bike Association (NSMBA)”.
Geoff Gulevich, Orbea Ambassador - freerider

Rise M Team
Geoff elige nuestra Rise para su estilo de rodaje North Shore. Sinceramente, a la mayoría de las personas les recomendaríamos la Rallon o la Wild FS, pero la M-Team resulta perfecta para el estilo de Geoff, suave pero juguetón.
“North Vancouver es un lugar curioso porque justo al lado de una enorme urbe te encuentras con terrenos silvestres. Cuando la comunidad de constructores de senderos observa la ladera de una montaña, ve un lienzo en blanco lleno de posibilidades. Pero cuando la observan los gestores de tierras, ven un mosaico de terrenos con intereses en conflicto, derechos, títulos de propiedad... todos estos factores hay que tenerlos en cuenta”.
John Hawkins, director de Senderos y Espacios Recreativos
“Espero haber creado senderos divertidos y que sirvan para que la gente sonría. Ese es el legado que quiero dejar”.
Todd “Digger” Fiander, constructor de senderos
Aunque la construcción clandestina se haya reducido de manera considerable, siempre habrá personas que se opongan a las normas. Pero en el cómputo general, la mayoría de los ciclistas seguirán teniendo el mayor de respetos sobre las tierras y las personas que las gestionan.
Con la ayuda de toda la comunidad de constructores, ciclistas y el Gobierno, la esperanza es que estos senderos perduren para que las futuras generaciones también puedan disfrutar de este maravilloso lugar.


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Rise M Team
Geoff monta la Rise M-Team, y la horquilla Fox 36 es la elección obvia para su estilo de rodaje. La batería de 360 Wh permite reducir al máximo el peso de la bici, al tiempo que le proporciona toda la potencia que necesita para afrontar esos senderos de North Shore.


Geoff Gulevich
Veterano del Red Bull Rampage, residente en North Shore y uno de los ciclistas más competentes que pueden encontrarse, Geoff no necesita presentación. Además de ser uno de los mejores exponentes del freeride, Geoff produce contenidos excelentes que hacen que los senderos más complicados parezcan sencillos gracias al estilo que le caracteriza.
Sabemos que el idioma, el euskera, es una lengua inusual, de las pocas de este tipo que existen en el mundo, que ha sobrevivido a numerosos desafíos y que actualmente tiene una amplia comunidad de hablantes.
Los vascos eran balleneros e intrépidos marineros, al igual que pastores y agricultores. Desconocemos cuándo comenzaron a cazar ballenas, pero sí sabemos que dominaban el comercio marítimo a finales de la Edad Media. En el siglo XV, aproximadamente un 80% de las embarcaciones que atracaban en Bristol (Reino Unido) eran vascas y llegaban repletas de mineral de hierro, aceite de ballena, lana de Castilla y vino de Burdeos.

Los vascos necesitaban barcos robustos para poder sobrevivir a la brava mar del Golfo de Vizcaya y la tierra suministraba los materiales perfectos para ello.
Las montañas vascas contaban con abundantes yacimientos de mineral de hierro, además de bosques para obtener el carbón vegetal necesario para refinarlo. Asimismo, los bosques de robles y hayas proporcionaban una madera de gran resistencia. El azar también intervino y, en algún momento del siglo IX, un encuentro con los vikingos enseñó a los vascos una forma mejor de construir embarcaciones sólidas y rápidas. El aprovechamiento máximo de sus recursos naturales y conocimientos supuso que la tecnología de construcción naval vasca se desarrollara cada año hasta que llegaron a convertirse en dominadores de esta industria a escala mundial.

Los caminos del hierro son más amplios, con suaves curvas y giros, y a menudo atraviesan túneles en las laderas de las montañas.
En estos caminos se extraía el mineral de hierro y se transportaba montaña abajo con carromatos y, más adelante, con pequeños ferrocarriles.
Por supuesto, una historia industrial de este calibre deja huellas en la tierra y, hoy en día, todavía se pueden recorrer los antiguos caminos que comienzan en lo alto de las montañas que bordean la costa. Los estrechos y sinuosos senderos que transportaban carbón desde las montañas pueden reconocerse fácilmente por las marcas regulares de tierra chamuscada donde se transformó la madera en carbón vegetal a lo largo de los siglos.

“La Occam es perfecta para esos senderos naturales sinuosos y estrechos en los que uno necesita de verdad una bici extremadamente ágil.”
Los caminos del hierro y del carbón vegetal confluyen en la costa, donde el mineral se convertía en hierro y acero utilizando el calor del carbón.
Sin embargo, no terminan allí. Desde la costa, se abren en abanico y siguen a las rutas balleneras y comerciales a través de la inmensa extensión de un océano sin caminos trazados. Allí resulta más difícil seguir los caminos, pero no es imposible. Los historiadores pueden rastrear los barcos vascos gracias a registros antiguos, y también las huellas que dejó el idioma en los pueblos de países lejanos.
De esta manera, sabemos que los vascos se aventuraron en Noruega muy temprano en su historia y, desde allí, se dirigieron a Islandia. En el siglo XVI, los intrépidos marineros vascos ya cruzaban el Atlántico con frecuencia para comerciar con Canadá.

Rise M-Team
Lierni monta nuestra Rise de más alta gama, la bici más ligera de la familia Rise, una máquina diseñada para ampliar tu experiencia de trail y hacerte vivir experiencias únicas. Más bici, menos eléctrica.
A finales de este mismo siglo, se calcula que 5.000 vascos navegaban por el Atlántico cada año, sin cartas náuticas, y comerciaban de forma pacífica con los pueblos indígenas de América. Cabe destacar que los vascos no padecieron escorbuto durante estas travesías, una enfermedad que todavía se llevaba por delante la vida de marineros británicos y franceses 200 años después. Esto se ha atribuido a su abundante consumo de sidra durante los viajes, una tendencia que todavía puede apreciarse en cualquier bar del País Vasco.
Por lo tanto, los caminos que comienzan en lo alto de las montañas desembocan en la costa y, desde allí, se extienden a lo largo del océano Atlántico hasta Canadá.
Hoy seguimos uno de estos caminos, el del barco “San Juan”. Este camino probablemente se originó a mediados del siglo XVI, cuando se taló un árbol y se convirtió en tablones de madera. Al mismo tiempo, se extrajo mineral de hierro de la tierra y se produjo carbón vegetal en lo alto de la montaña. Estos tres ingredientes siguieron nuestros caminos por la montaña, atravesando túneles, cruzando puentes y recorriendo los bosques hasta la costa. Allí, algunos de los mejores artesanos del mundo trabajaron estos materiales y así, poco a poco, nació el San Juan.

Medía aproximadamente 16 metros de largo, pesaba 240 toneladas y contaba con 3 mástiles y una tripulación de 60 robustos marineros vascos. Zarpó en 1565 para perseguir a la huidiza ballena franca por todo el implacable océano Atlántico hasta llegar a Terranova. Tras atracar allí, los marineros comerciaron con los indígenas de la zona, les enseñaron un poco de euskera y transformaron la grasa de ballena en aceite. Fue en este lugar donde se produjo la tragedia en forma de tormenta que rompió la cadena del ancla y hundió la embarcación en las frías aguas de Red Bay, Terranova. Allí permaneció durante más de cuatro siglos hasta que fue descubierta en 1978. Gracias al agua fría y a la capa de fango, el barco se conservó perfectamente y, a lo largo de los 30 años siguientes, un equipo de científicos trabajó sin descanso para sacar cuidadosamente algunas de sus partes a la superficie, modelarlas y volverlas a colocar en su tumba submarina.

Albaola es la fundación vasca creada para reconstruir el San Juan utilizando los métodos tradicionales y materiales locales.
Las labores empezaron en 2013 con la selección y tala de árboles locales; el hierro local se transformó en clavos y los artesanos de la zona comenzaron el meticuloso proceso de reconstrucción del San Juan utilizando técnicas ancestrales que habían caído casi completamente en el olvido. Una vez terminado, el barco seguirá de nuevo las antiguas rutas y se adentrará en el otro lado del Atlántico para recrear aquella fatídica travesía de 1565. Mientras tanto, los riders locales seguirán recorriendo los caminos que serpentean desde las cumbres de las montañas vascas hasta la orilla del Atlántico, desde donde surcan las olas hacia costas lejanas donde no podemos seguirlas.




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Occam M10
Igor monta la Occam M10 equipada con la robusta horquilla Fox 36 y el kit de acabado Raceface. Con su estatura de 1,76 m y su experiencia en BMX, Igor utiliza la M con una tija Fox Transfer de 170 mm.

Rise M-Team
Lierni monta la versión M-Team de la Rise. El control adicional que le proporciona la horquilla Fox 36 es perfecto para el estilo de rodaje de Lierni, al proporcionarle una mayor confianza en los descensos; no obstante, la bici continúa siendo lo suficientemente ligera como para llevarla a hombros.

Occam M10
Doug mide 1,79 m y utiliza la Occam de talla grande con una tija Transfer Dropper de 170 mm y horquillas Fox 36. Doug utiliza pedales planos y elige los Race Face Atlas. El patrón de colores dorados se escogió gracias al programa MyO.

Igor Eskudero
Igor procede del mundo del DH y el BMX, pero su amor por la montaña le llevó a introducirse en el mountain bike. Igor trabaja como guía para basqueMTB y comparte su pasión con corredores llegados desde todos los rincones del mundo.

Lierni Lekuona
Lierni comenzó a rodar en carretera antes de descubrir la diversión que le proporcionaban los senderos. Le encanta repartir su tiempo entre las carreras de XC y las largas travesías de trail.

Doug Mcdonald
Doug se enamoró del País Vasco en 2009 y creó una empresa de guías de mountain bike. Podrás encontrarlo guiando a personas procedentes de todo el mundo por los mejores senderos de los Pirineos.
Estos caminos ofrecían las rutas más rápidas entre las aldeas ubicadas en valles aislados. A menudo tomaban senderos complicados que cruzaban pasos de alta montaña, en lugar de hacer trayectos más largos y seguros a través de los valles.
Estos senderos hunden sus raíces en la historia; nos permiten descubrir antiguas formas de vida, viejas alianzas y vías comerciales históricas.

Están tan impregnados de historia humana que, al transitar por ellos, uno no puede evitar tener la sensación de que dejan en él una huella más profunda que la que uno deja en ellos, conectándonos con todas aquellas almas que pasaron por allí antes que nosotros.


Rise H10
La Rise H10 es la compañera perfecta para esos senderos. Su batería de 540 Wh amplía el abanico de posibilidades, aunque la bici sigue siendo lo suficientemente ligera como para llevarla a hombros hasta la cima si es necesario.
Un nuevo propósito
A principios del siglo XX, la pérdida gradual de las formas de vida rurales provocó la despoblación masiva de amplias zonas de España. La gente buscaba una vida mejor en las ciudades. Poco a poco, estas zonas quedaron desiertas, y las pequeñas aldeas y sus casas fueron quedando abandonadas.
Los pueblos que sobrevivieron se comunicaron a través de nuevas carreteras, gracias a los enormes proyectos de ingeniería civil que tan bien se les dan a los dictadores fascistas. Como resultado de estos cambios, muchos caminos perdieron su propósito original, y cuando un sendero pierde su razón de ser, rápidamente desaparece.

Unos pocos locos
Esta no es, por tanto, una historia de invención, sino más bien de reinvención. Los senderos que antiguamente sirvieron para un uso histórico perdieron su propósito cuando la geografía humana cambió y desaparecieron hasta que encontraron una nueva utilidad gracias a un pequeño grupo de apasionados del mountain bike. Aquellos pioneros encontraron los antiguos senderos en viejos mapas o hablando con generaciones pasadas.
¡Solo éramos unos pocos locos… unos cuantos románticos que ascendíamos las montañas con nuestras bicis!
Aquella búsqueda por conocer qué había al otro lado, por encontrar el sendero perfecto por el que nadie hubiera transitado antes, llevó a aquellos riders a puntos más altos y remotos en las montañas. Sin embargo, la realidad no siempre se corresponde con lo que soñamos, ya que se encontraron con que muchos caminos estaban tan deteriorados que era imposible rodar por ellos o no resultaban para nada divertidos.
Pero esto no detuvo a los exploradores sobre dos ruedas, que pidieron permiso para reabrir antiguos senderos y, armados con picos, palas y motosierras, los transformaron, reabrieron y prepararon para la práctica del mountain bike.

Fue la primera vez que utilizaba la Rise H y me sorprendió de verdad. Al rodar, las sensaciones son muy parecidas a las de mi Occam, pero además es muy versátil y me permite superar mis propios límites en las travesías de alta montaña.
- Quiri
La pasión inspira; nuevos usuarios, una nueva vida
Los tiempos han cambiado y ahora se considera normal rodar en lo alto de los Pirineos, al menos entre ciertos sectores de la comunidad del mountain bike.

A medida que aumenta el número de riders que usan estos senderos, dicho uso los mejora. El paso de las ruedas suaviza la superficie y cada corredor que se detiene para retirar una roca o cortar una rama ayuda a darle aún más vida.
Y no olvidemos a personas como Javier, Ángel y Maia, quienes, junto con el resto de las personas implicadas en estos proyectos de trail, se han dedicado a mantener, mejorar y, sobre todo, fomentar el uso de estas antiguas rutas. Son los usuarios los que dotan de propósito a estos caminos, y esta es la única forma de que cobren vida.
El legado
Al igual que en un pasado lejano, estos senderos están empezando a atraer de nuevo el comercio a estas diminutas aldeas pirenaicas. Una forma de comercio diferente, por supuesto, pero comercio al fin y al cabo. Conforme los riders ruedan por estos caminos, surgen nuevas oportunidades de diversificar la economía de la zona, y los pueblos, que una vez estuvieron llenos de campesinos, albergan hoy en día empresas de transporte, guías, tiendas de bicicletas, bares, restaurantes y hoteles.
La vida da forma a los senderos, al igual que los senderos dan forma a la vida. Este ciclo, que pervive durante generaciones, no ha cambiado. Los usos sí, y los usuarios también, pero aunque todo mute, los senderos perduran.
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Rise H10
La bici utilizada en estos episodios es la Rise H10 con colores MyO personalizados. La combinación de la batería de 540 Wh, unas robustas horquillas Fox 36 y la ligereza de la bici hace que sea perfecta para esas largas jornadas de exploración por escarpados senderos de montaña.


Quiri
Quiri formó parte de una célebre banda de punk en los ochenta, pero ahora se dedica a explorar senderos de alta montaña en los Pirineos para disfrutar de fuertes subidones. Quiri comparte sus aventuras y las risas que se echa en sus travesías a través de su famoso canal de YouTube.

César
César fue uno de los integrantes de un grupo de ciclistas que llevaron su propia marca de freeride a los Pirineos españoles. Por desgracia aquellas acrobacias forman parte de un pasado lejano, pero César sigue compitiendo con éxito en pruebas de gravity, es un activo constructor de senderos y en la actualidad vive en Whistler.
Hace mucho tiempo, algunas aguerridas comunidades prosperaron en estas tierras, pero a principios del siglo XIX, estas poblaciones migraron gradualmente hacia las ciudades en busca de una vida más fácil.
Algo parecido ocurrió en gran parte de la España rural. Pequeñas aldeas quedaron abandonadas y casas que en otro tiempo albergaron familias se convirtieron en ruinas habitadas por aves.
Hoy en día Guara es un lugar desértico y una de las zonas menos pobladas de Europa, con una densidad de población casi cuatro veces inferior a la del Sáhara.
En este salvaje lugar hay que andar con cuidado, los visitantes incautos pocas veces quedan impunes; y es que, como acostumbran a decir los habitantes locales, Guara puede matarte si quiere.

Sin embargo, a pesar de su evidente espíritu salvaje, Guara es innegablemente hermoso. Está lleno de contrastes y sorpresas, con increíbles afloramientos rocosos, arroyos cristalinos, impresionantes saltos de agua y deslumbrantes vistas sobre las montañas del Pirineo hacia el norte.
“Es la primera vez que ruedo por Guara y estuvo genial recorrer senderos con tanta historia. Me impresionó mucho el paisaje rocoso natural y lo divertido que fue atravesarlo. Además, hoy ascendimos casi 2000 metros y la batería de la Rise aguantó como si nada”
- Damien Oton

En ocasiones, te topas con alguien que se mimetiza tanto con su entorno que das por sentado que siempre ha estado en ese lugar. Precisamente esto es lo que ocurre cuando conoces a Bertrand.
Bajo su sucio sombrero de ala ancha, el rostro de Bertrand, animado y curtido por el clima de Guara, cuenta la historia de una vida llena de aventuras.
El brillo de sus ojos deja entrever su humor y amor por la vida, pero no cabe ninguna duda de que es un hombre fuerte, alguien a quien se debe tratar con respeto. Sería comprensible pensar que Bertrand lleva toda su vida recorriendo estas tierras, pero no es así.
La leyenda cuenta que, un buen día, Bertrand deambulaba por el desierto del Sáhara cuando se encontró con otro viajero que vio en él un alma gemela. Este viajero le reveló a través de un mapa la ubicación de un pueblo abandonado.


Bertrand volvió a casa, metió las maletas en su destartalado coche y siguió el mapa hasta llegar por fin a Nocito, en el centro de Guara. Aquí tan solo encontró caminos de tierra interrumpidos y edificios parcialmente en ruinas, pero en esta zona salvaje, supo inmediatamente que había hallado su lugar en el mundo y se dispuso a redescubrir los secretos que allí se escondían. Esto ocurrió hace más de 40 años, pero Bertrand sigue aquí.

Primero a pie y luego con sus amados caballos, Bertrand fue encontrando los viejos senderos que dejaron las generaciones anteriores y comenzó a reabrirlos. Con la ayuda de otros pioneros afines a él, se pusieron a reconstruir las casas en ruinas, piedra a piedra, y poco a poco fueron devolviendo el pueblo a la vida.
En aquella época, la única manera de llegar a Nocito era a través de un complicado camino de tierra. La pequeña carretera no llegó hasta hace aproximadamente 15 años y pasaron décadas antes de que hubiera electricidad o un teléfono. A pesar de ello, se formaron familias y nacieron niños, entre ellos la hija de Bertrand y Maji, Eva, que fue una de las pocas niñas que nació en Guara en más de un siglo. Los niños son vida para un pueblo. Y no solo eso, sino que Bertrand también se dio cuenta de que los caminos que había redescubierto podrían atraer visitantes, empresas y vida a Nocito.

Esos caminos tenían que ser utilizados o, de lo contrario, desaparecerían. Y, en este preciso instante, los mountain bikers entraron en escena.
Los primeros que llegaron empezaron a buscar los senderos rotos que Bertrand había reabierto, con la intención de superar sus propios límites recorriendo los caminos naturales más complejos que pudieran encontrar. La Sierra de Guara les proporcionó este paraíso. Bertrand se los mostró a los primeros riders en mapas dibujados a mano y, a veces, incluso les acompañaba montado en su caballo.

“Cuando oí que tendría que seguirle el ritmo a un caballo en los ascensos y a Damien Oton en los descensos, solamente quise una bici: ¡La Rise!”
- Doug Mcdonald

Estos primeros riders exploraron y descubrieron poco a poco los mejores senderos y las maneras de entrelazarlos para formar rutas. Estas exploraciones llevaron a menudo a las bicis y a sus dueños hasta el límite, y más de algún rider local muestra aún cicatrices como consecuencia del carácter indómito de estas tierras. Y así, sendero a sendero e historia a historia, la leyenda de Guara se difundió por la comunidad local de mountain bike.

Cuando Bertrand habla sobre sus caballos, utiliza mucho una palabra: respeto.
Se trata de un elemento clave en las relaciones que forja con cada animal: los invita a que le acompañen y les promete diversión en lugar de emplear la fuerza. Se pueden trazar muchos paralelismos entre esta actitud y el tipo de relación que debemos establecer los riders con lugares salvajes como Guara. Podemos utilizar estos paraísos para nuestro disfrute, para pasarlo bien, pero el RESPETO debe ser un elemento fundamental. Respeto por Guara, sus habitantes, su historia, su naturaleza y, por su puesto, sus senderos. Si mostramos respeto, podremos seguir compartiendo y teniendo acceso a estos lugares, pero, sin él, debemos ser conscientes de que la relación con la naturaleza será corta y estará plagada de conflictos.


Pedalea con libertad, diviértete, explora y disfruta, pero siempre desde el respeto. ¡AUPA!
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Rise M-Team
Doug y Damien montan en nuestra Rise M-Team con la batería de 360 Wh y la horquilla Fox 36. La ligera Rise C cuenta con suficiente batería para que riders en buena forma pedaleen durante toda la salida y aporta solamente la ayuda necesaria para disfrutar de esos ascensos técnicos en Guara. Tanto Damien como Doug eligieron las cubiertas Maxxis Minion a través del programa MyO. Doug utiliza los puños Raceface Getta Grip de 33 mm de ancho, que, según afirma, ayudan mucho a sus manos en estos escabrosos senderos.


Damien Oton
Damien es uno de los mejores corredores de enduro del mundo y, además, también es un buen chaval. Cuando no está pedaleando, se le puede encontrar tocando la guitarra y pasando tiempo con su familia.

Doug Mcdonald
Doug se enamoró del País Vasco en 2009 y creó una empresa de guías de mountain bike. Podrás encontrarlo acompañando a riders procedentes de todo el mundo por los mejores senderos de los Pirineos.